Boda de Hierro: ¡Willi y Sophie Mensching celebran 65 años de amor!
Willi y Sophie Mensching de Ottensen celebran 65 años de matrimonio y comparten conmovedores recuerdos y sabiduría.

Boda de Hierro: ¡Willi y Sophie Mensching celebran 65 años de amor!
¡Qué hermosa ocasión! El fin de semana pasado Willi y Sophie Mensching celebraron su boda de hierro. Hace 65 años, ambos se dieron el sí en Beckedorf, “después de la cosecha del heno y antes de la cosecha del grano”, como revela Sophie con una sonrisa. Juntos recuerdan una vida plena con muchos viajes y momentos compartidos.
Sophie, la menor de los dos, de 86 años, nació en Rehren, mientras que Willi, que ahora tiene 90 años, nació en Ottensen. Ahora ambos viven en una espaciosa propiedad en casa de los padres de Willi, donde la familia también se reúne periódicamente. Uno de los rituales diarios de los mayores es una agradable charla tomando café a las cuatro de la tarde, a menudo en compañía de sus hijos, su nuera y dos nietos.
Una vida llena de aventuras
Los dos se conocieron en una fiesta del pueblo en 1956 y el compromiso se selló románticamente durante unas vacaciones en Sylt. Sophie trabajó durante algún tiempo como cartera en Lüdersfeld y Lindhorst y también en la agricultura y el comercio minorista. Entre otras cosas, trabajó durante 25 años como guía turística, presentando a los visitantes de su distrito natal la historia y las costumbres. Su amor por la región y por el prójimo se refleja también en su pasión por la escritura: escribió junto con su hija el libro especializado “Red Skirts”, que incluso fue traducido al inglés.
Viajar siempre fue un gran momento destacado para la pareja. No es necesario viajar muy lejos para descubrir la belleza del mundo. La lista de sus destinos abarca desde EE. UU. hasta Canadá y Australia, donde Willi describe una granja en el sureste como el lugar más hermoso que jamás hayan visitado. “¡Teníamos una buena habilidad para vivir aventuras emocionantes!” dice Willy.
Un toque de tradición
Cuando se habla de Baviera y sus tradiciones, inevitablemente nos vienen a la mente las numerosas fiestas populares. El Rosenheimer Herbstfest es uno de los más conocidos. Con sus carpas decoradas festivamente que ofrecen una variedad de especialidades bávaras como spaetzle y Maultaschen, atrae cada año a alrededor de un millón de personas. Sus orígenes se remontan al año 1810, cuando se celebró la boda del príncipe heredero Luis de Baviera.
Este año el festival de otoño vuelve a ser muy popular y la expectación de los visitantes es palpable. Otro punto destacado es el Wasen en Stuttgart, conocido por su comodidad suaba y la posibilidad de disfrutar de delicias regionales. ¿Y quién no conoce los trajes tradicionales que siempre fascinan en estas fiestas? Los trajes típicos tradicionales y los pantalones de cuero, decorados con artísticos bordados, dan a las fiestas un toque encantador y tradicional.
Sin embargo, una fiesta bávara no es sólo un placer para la vista, sino también una experiencia culinaria. Desde Rupfhooden hasta sustanciosas albóndigas: la cocina bávara ofrece una colorida variedad de especialidades que vale la pena descubrir. Ya sean dulces o platos salados, aquí hay algo para cada paladar. Los gorros de desplumar, a menudo preparados según la receta de la abuela, son un excelente ejemplo de cocina tradicional que se transmite de generación en generación.
Tantas pequeñas historias y tradiciones muestran cuán valiosas son las conexiones entre las personas. Para Willi y Sophie Mensching, sus 65 años de matrimonio no sólo son un motivo de celebración, sino también un hermoso ejemplo de lo que significan estabilidad y unión. ¡Felicitaciones a ustedes dos!